@ CamilaBozzo1

Este licencioso y libertino Ministerio de Educación quiere imponernos la ideología de género para homosexualizar a nuestros hijos, el futuro de la nación, ¡qué horror! Debería llamarse Sodoma y Gomorra. Sí, quiere normalizar ese hombre con hombre y mujer con mujer, y hasta se habla de un tercer sexo, ¡horror! Además, quieres hacer creer a las chicas que son iguales a los chicos, un escándalo, ¿verdad? Las mujeres a la cocina, a cuidar a sus maridos y a hacer lo que mejor saben hacer: tener hijos. Y eso es.

Por fantasioso que parezca, he recopilado (no literalmente, por supuesto) algunas de las declaraciones más delirantes que nos han dejado nuestros políticos en los últimos años.

VISIÓN: Recursos naturales en el campo

Afirmaciones como estas no son aisladas, ni pertenecen a las convicciones muy personales de sus voceros, en realidad son parte de la resistencia o contraofensiva de un sector conservador, vinculado a ciertos grupos religiosos, que creen que la identidad y los valores cristianos del país Están siendo amenazados por una agenda cultural libertina y disoluta que conspira contra la familia y las tradiciones más arraigadas de nuestra sociedad.

Este sector ha estado participando en la política. En el Congreso anterior, con personajes como Tamar Arimborgo y Pastor Rosas como voceros, se convirtieron en una piedra en el zapato del Ministerio de Educación y su afán de hacer la educación más moderna y plural. De hecho, derrocaron a tres ministros, detuvieron la aplicación del enfoque de género y bloquearon la agenda de derechos LGTBI.

Ahora se sienten empoderados porque han encontrado en Rafael López Aliaga a un candidato que no solo abraza abiertamente su discurso (acabo de leer su entrevista ayer en El Comercio, o escuche a su candidata a la vicepresidencia, Neldy Mendoza) sino que también tiene posibilidades tangibles de irse. a la segunda ronda. ¿Le darán los peruanos el apoyo suficiente para que lo haga?

Presidente Sagasti:
Además, César Acuña sobre el Sputnik V: “Confío en que lleguemos a un acuerdo con el embajador ruso”; y Keiko Fujimori a Francisco Sagasti: “No necesitamos más mecedoras, necesitamos la cantidad de vacunas y la fecha de llegada”.