La huelga de hambre iniciada por los dirigentes nacionales y regionales del Sindicato Unitario de Trabajadores de la Educación del Perú (Sutep) en demanda de más presupuesto entró al undécimo día sin que las autoridades del sector hayan propuesto solución alguna.
Quince docentes, incluidas cuatro mujeres, permanecen sobre colchones en la vereda de la cuadra 5 del Jirón Camaná, junto a la sede del sindicato. Treinta docentes iniciaron la drástica medida; sin embargo, después de siete días un grupo tuvo que ser evacuado debido al grave deterioro de la salud. El viernes 25 también fue destituido el profesor Héctor Sinche. Estuvo nueve días en esta lucha, pero su diabetes fue más fuerte.
Médicos de la Federación Médica del Perú, que vigilan la salud de los huelguistas, recomendaron el traslado de quienes comenzaron a presentar descompensación. Los médicos llevan un expediente médico junto con una declaración jurada en la que los manifestantes afirman que voluntariamente entraron en huelga de hambre.
Durante el día y la noche están acompañados por profesores, que están atentos a cualquier episodio.
Entre los quince que mantienen su decisión de continuar con la huelga de hambre, ya se nota el paso de once días sin comer.
En estos días han recibido la solidaridad de sindicatos de América Latina y también de Perú como CITE, CGTP, Fentase, CTE y CTP.
mira el congreso
El secretario general de la Sutep, Lucio Castro, quien encabeza la medida de fuerza, dice que esta huelga se decidió al conocer que el proyecto de ley presentado por el Ejecutivo sobre el presupuesto 2023 proponía reducir de 4,2 a 4,1 el monto destinado a educación. No había programado un aumento de sueldo para los auxiliares docentes y persistió en el aumento de las cuotas para los docentes titulares. Tampoco mencionó a los desempleados y jubilados.
El dirigente señala que ahora el Congreso tiene la oportunidad de aprobar el presupuesto de la República y enmendar el plan al Gobierno “para que vea la educación como una inversión y no como un gasto”.
Agrega que lo que proponen en su plataforma de lucha beneficiará a 547 mil docentes y cerca de 30 mil auxiliares educativos. “Somos los peor pagados de América Latina”, señala. También lamenta la ratificación de Rosendo Serna en el sector Educación.
líderes regionales
Fernando Peña Farfán, secretario general del Sutep en Apurímac, tiene 65 años y se encuentra en su segunda huelga de hambre por una educación de calidad para 8 millones de estudiantes.
“Queremos un aumento para las porristas de Pronoei que ganan 500 soles. Educan a los niños de 0 a 3 años de 7:30 am a 1:45 pm La educación está abandonada”, dice.
Maruja Leyzaquía Vargas, secretaria de equidad y género del Comité Ejecutivo Nacional del Sutep, recuerda que la mayoría de los docentes son mujeres y la situación que atraviesan es una forma de violencia.
“A media cuadra está el Ministerio de la Mujer y su ministra ni se ha acercado a ver a las que estamos luchando por mejores condiciones de vida para nuestras niñas y las mujeres del Perú”, cuestiona.
Mientras que César Coral García, dirigente loretano, reclama la visibilización de la educación intercultural bilingüe, que tiene enormes vacíos y cuyos avances han retrocedido en la actual administración.
Y Roger Pintado, representante de los asistentes a la educación de Lambayeque, pide al Congreso y al Gobierno que también los vigilen.
Al final de esta nota se conoció la muerte del padre del líder Lucio Castro.
Datos
Congreso. La Asamblea Legislativa discutirá el proyecto de ley de presupuesto de la República para 2023, los primeros días de la próxima semana. Los docentes anuncian que el lunes se dirigirán al Congreso para pedir a los 130 legisladores que no le den la espalda a la educación.
Visitar. La diputada Flor Pablo llegó para expresar su solidaridad con los maestros en huelga.
